miércoles, 12 de octubre de 2016

Visionado en diferido de una mesa redonda virtual sobre la Flipped Classroom

Buenas noches:

Como una de las tareas del curso de Flipped Classroom que estoy haciendo para INTEF, acabo de visionar una mesa redonda en diferido con reflexiones sobre las bonanzas de este modelo.
La primera reflexión que me viene a la mente es el valor que tiene el hecho de que la gente, en un país en el que la educación está cada día más denostada no sólo por sus usuarios (alumnos, padres...) sino por sus propios responsables (instituciones, gobierno...), se "busque las castañas" por su propia cuenta para poder ofrecer a sus alumnos toda la calidad que merece el desempeño de una profesión como es la docencia. Me parece admirable que la gente busque, investigue, navegue y comparta información de forma altruista y gratuita para poner el mayor número de recursos posibles al alcance del mayor número posible de docentes y alumnos, y creo que deberíamos encontrar más espacios comunes en los que debatir y juzgar nuestras experiencias como grupo para que la enorme cantidad de herramientas de las que todos disponemos no se queden nadando en el oscuro ciberespacio esperando a que un aventurero las rescate y las lleve a la vida.
En segundo lugar, aunque creo que este modelo es una muy buena forma de enganchar a los alumnos ante conocimientos que se les hacen áridos, oscuros y muchas veces inútiles, hay algunas cosas que pese a que voy avanzando en el curso, me siguen produciendo mucho escepticismo:

  • Se basa en el trabajo autónomo de los alumnos, lo cual es maravilloso, pero por otra parte supedita las clases al trabajo en casa del alumnado. ¿Qué hacemos cuando no responden como debieran o como esperábamos?
  • ¿Es realmente sensato confiar en el trabajo del alumnado en sus casas cuando desde todos lados recibimos quejas porque nuestros alumnos tienen demasiadas tareas en casa?
  • España es uno de los países más atrasados de Europa en ancho de banda y en conexiones a Internet, y la mayor parte de nuestras aulas no son precisamente del Siglo XXI. ¿Realmente podemos aspirar a un modelo educacional en el que la tecnología juegue un papel tan importante?
  • ¿Es realmente posible instaurar este tipo de clases en un centro en el que los demás compañeros no están en esa misma línea o generará problemas organizativos y estructurales dentro del colegio? Y en caso de que todo un centro apueste por este tipo de enseñanza... ¿Cómo solventamos la brecha de conocimientos tecnológicos entre los diferentes docentes de un mismo centro?
Por otra parte, en este momento concreto de la Historia Política española, en el que las leyes de educación no duran más de cuatro años y parece que nos empezamos a poner todos (profesores, alumnos, padres y políticos) de acuerdo en que esto es un disparate, es posible que sea más rentable apostar por la creación de este tipo de recursos que son ajenos a los currículos cerrados porque siempre serán útiles y adaptables, que a otro tipo de reflexiones como reordenaciones de currículos o elaboración de unidades didácticas adaptadas a tal o cual modelo de ley.
En cualquier caso, creo que el acceso a los recursos es demasiado complejo para los docentes, ya que lleva demasiado tiempo porque parte en casi todos los casos de iniciativas privadas o de profesores brillantes que deciden compartir sus aportaciones en foros diversos, por lo que me parece fundamental aunar fuerzas y encontrar espacios en los que sea más sencillo compartir y sobre todo encontrar información sobre lo que ya ha funcionado bien en otros sitios, para que la retroalimentación sea constante y la calidad de la enseñanza sea el orgullo de todos nosotros y nuestros alumnos, algo que hoy, por desgracia, está muy lejos de suceder.

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